Este simple ensayo sobre la autopoiesis de la corrupción está basado en fragmentos del
"El árbol del conocimiento", obra de Maturana, en el que planteo la autopoiesis de un sistema corrupto, cuyos actores (simbiosis corruptor-corrupto) defino como vivillos de primer orden.
La autopoiesis [autoproducción o autocreación] designa un sistema capaz de reproducirse y mantenerse por sí mismo.
La corrupción como una maquinaria autopoiética (definida como una unidad) es una red de procesos de producción (transformación y destrucción en el sentido moral) de componentes (miembros del partido, amiguetes y familiares) quienes:
i) a través de interacciones y transformaciones continuamente regeneran y realizan la red de procesos (relaciones) que los producen y
ii) la constituyen (la maquinaria) como una unidad concreta en el espacio (los componentes) que existe especificando el dominio topológico de su realización como una red.
Autopoiesis de la corrupción puede ser también definida como la relación entre la complejidad de un sistema corrupto y la complejidad de su entorno político.
Esta vista generalizada de autopoiesis considera systemas como autoproductoras no en término de sus componentes físicos (dinero conseguido con sus mecanismos corruptos) sino en términos de su organización, lo que puede ser mensurable en términos de información y complejidad.
En otras palabras, podemos describir al sistema corruptible (interrelación corruptor-corrupto) autopoiético como aquel que produce más de su propia complejidad que una producida por su entorno político.
Un sistema corrupto autopoiético debe ser contrastado con un sistema allopoiético, entorno donde también medra la corrupción, como una fábrica a cargo del Estado, que como cualquier otra fábrica requiere materiales primarios (componentes) para construir un objeto o instrumento (una estructura organizada) el que es diferente a sí misma (la fábrica).
Así, cuando el sistema se extiende fuera de la fábrica para incluir componentes en el entorno de la fábrica, como cadenas de proveedores, equipamento, trabajadores, acuerdos, clientes, contratos, competidores, máquinas y herramientas, etc.; como un completo sistema viable, podría ser considerado en su totalidad como una red de corrupción autopoiética.
Ésto implica que el carácter autoreferencial de un sistema corrupto no se restringe al plano de sus estructuras sino que incluyen sus elementos y sus componentes es decir, que él mismo construye los elementos de los que consiste. Y todos acaban corruptos.
Practopoiesis de la corrupción
Con mecanismos cada vez más refinados se adapta entre diferentes niveles de organización.
La interrogante es cómo un mecanismo que permite adaptación se adapta a sí mismo.
Acorde a la teoría de la corrupción, sus adaptaciones están organizadas en una jerarquía, el propósito de procesos de adaptación en un nivel bajo de la organización es la creación del mecanismo de adaptación a un siguiente nivel más alto de organización.
Cuando un grupo poblacional "originario" -conforma y apoya un partido político que los representa con un cacique de orígenes similares (subespecie: homo politicus corruptus var. aborigine)- es considerado como un sistema adaptivo, debe ser incluído un nivel de organización extra:
la evolución por selección natural
Por la naturaleza de su modus vivendi y sus mejoras gananciales, los corruptos viven en mejores condiciones, tienen acceso a mejores servicios, mejores y más hembras para gozar y reproducirse... y por lo tanto tienen mejores chances de una prole numerosa y esa nueva generación va a ser, con seguridad... también altamente corruptible y corrupta!
Acorde a la practopoiesis, la falta de una jerarquía adaptiva más profunda entre esta subespecie de politiquero es el principal factor de limitación para su habilidad de lograr cierto nivel de inteligencia.
Limitaciones que conocemos perfectamente entre pseudo-librepensantes y semi-pensantes con títulos académicos e ínfulas de catedráticos.
El cretinismo político de los izquierdosos es algo tan seguro como el envejecimiento. Y su tendencia a corromperse es directamente proporcional al cretinismo.
De aparentes lumbreras con cargos universitarios y considerados por sí mismos y sus acólitos como intelectuales de renombre (en un país de cegatos e incapacitos de semiintelecto) se transforman en una masa amorfa y recontraestúpida de politiqueros en función de gobierno y otros cargos similares.
La estupidez cotidiana y continua que un ciudadano íntegro con cierto nivel de cordura tiene que ver, leer, oír y aguantar como sus discursos, políticas, acciones y enunciados es algo ya completamente indescriptible e inaudito.
Basta con leer los datos sobre los integrantes del plurigobierno en presidencia.gob.bo
Alguien duda de la corrupción de este plurigobierno?
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment